Somos psicologas de los problemas ajenos. Damos consejos sobre los conflictos de las personas que nos rodean. Aconsejamos a amigos sobre que hacer en su lugar. El famoso "If I were you...". Pero del mismo modo somos incapaces de seguir esos consejos que damos de manera gratuita y con la mejor intención.
No los seguimos, no porque sean malos o porque pensemos que no funcionan, es solo que normalmente tendemos a dar buenos consejos cuando el problema no nos toca en primera persona y necesitamos que alguien nos diga lo que nosotras hemos dicho tantas veces.
Es similar a cuando en tu cabeza ronda una verdad que te niegas a creer y que hasta que no la dices en voz alta o alguien lo hace por ti, no te quieres dar cuenta.
Por muy independientes que seamos o creamos que somos, necesitamos siempre a alguien que nos recomiende, que nos ayude y que nos de soporte delante de las pequeñas adversidades que se plantean en la vida. Ya sea sobre que vestido nos sienta mejor, que hacer delante de una primera cita, como mejorar las relaciones en el trabajo,... Prácticamente todo lo que hacemos o queremos hacer lo consultamos. Nos gustan las 2ª opiniones , los otros puntos de vista.
Escuchar a los demás es fundamental, hay que ser crítico con uno mismo y escoger la mejor opción o la que pensemos que nos hará mejor, aquella que se adapte a nuestra forma de ser, a nuestro carácter. Es fácil decirlo, muy difícil de hacer y mas cuando no sabes que hacer.
Ese es mi consejo de psicologa amateur, que abre 24 horas y que no tiene consulta. Este consejo que te doy posiblemente no lo siga cuando me pase lo mismo. Seguramente necesitaré a alguien que me diga "Si yo fuera tu.."
A.
